De nada.

Si necesitara sentirme superior a alguien más, lo haría comparando mi vida no mis posesiones lo haría comparando mis logros con los de otras personas, no lo haría alimentando mi ego ni lo haría subiéndome el autoestima basándome en adquisiciones superficiales. Si necesitara sentirme superior a alguien más, me miraría al espejo, me cuestionaría y trataría de responderme a mí mismo como he llegado a donde estoy y de qué forma actuó estando acá. Si necesitara sentirme superior a alguien más, lo haría haciendo que los demás notaran mi desagrado al mirarlos, lo haría con dos o tres palabras que les hiciera entender lo minúsculos que son, lo innecesarios y vacios que son. Si necesitara sentirme mejor, lo haría estando solo, lo haría mirando una pared blanca donde más tarde dibujaré más de una fantasía. Lo haría cantando con los ojos cerrados y con los pulmones negros, lo haría intentando cometer un crimen inimaginable, lo haría tratando de comprender todo lo que no me gusta pero que tengo que entender. Si necesitara ser mejor, no sería lo que he sido hasta ahora, o dejaría que mi vida la dominaran mis bestias semejantes. Si necesitara ser mejor, las letras no serían suficientes. Si necesitara sentirme superior a alguien más, lo haría dejando a un lado todo lo que conozco como fascinante, todo lo que brilla pero no es más que maíz, todo lo que no he querido entender. Dejaría a un lado mi propio mundo porque es difícil de entender algo con lo que ni siquiera quieres vivir.